El cantante argentino Sandro se debate entre la vida y la muerte a la espera de un trasplante urgente de corazón y pulmones, que sólo se le podrá realizar en por lo menos en los próximos seis meses, se informó aquí. La semana pasada, el legendario intérprete de clásicos como "Rosa, Rosa" y "Dame Fuego" fue operado para corregirle una fístula colón-vesicular y la intervención frenó la espera del donante de los órganos que requiere para seguir viviendo.A una semana de la operación, su esposa, Olga Garaventa, se mostró optimista al afirmar que Sandro "está perfecto" y en plena recuperación, ya que no necesita asistencia para respirar. "Del transplante no hablo", dijo en forma evasiva a la prensa mientras ingresaba al hospital donde está internado el ídolo, a sabiendas de que la sustitución de órganos es el tema más delicado para su famosa pareja.Sandro tiene 63 años y padece una enfermedad pulmonar obstructiva crónica, producto de una fuerte adicción al tabaco que lo llevó a fumar 60 cigarros diarios durante décadas.En los últimos años, el cantante incluso realizó conciertos auxiliado por un respirador en pleno escenario, hasta que ya le fue imposible continuar actuando y se recluyó en su casa, se casó y se dedicó a cuidar de su salud en el mayor sigilo posible.La discreción con la que trató de proteger su intimidad se rompió en mayo pasado, cuando funcionarios del instituto argentino a cargo de los trasplantes de órganos reconocieron ante los medios que Sandro estaba en la lista de casos urgentes.El caso desató un debate, ya que se especuló que el artista podría tener privilegios para recibir un corazón y pulmones en desmedro de otros pacientes, pero el mismo Sandro aclaró que esperaría su turno, como todos.
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