Uno de los grandes dilemas que a menudo se presentan en los padres, es la educación de los hijos durante la etapa de mayor rebeldía: La adolescencia. Y, la mayoría de ellos, ante la falta de control, suelen caer en dos extremos que no mejoran la situación: La libertad excesiva o la restricción autoritaria.
Recuerdo muy bien, que cuando estaba en la adolescencia, solía convivir con diversos tipos de jóvenes que estaban siendo educados bajo este tipo de extremos. Por un lado, tenía una compañera de clase a las que sus padres la dejaban hacer todo lo que quería, sin cuestionarla demasiado. Y por la otra, había una chica a la que sus papás no la dejaban hacer nada. ¿El resultado? La chica a la que le permitían hacer de todo, se convirtió en una persona renuente a acatar las normas sociales y a la que no le importaba las consecuencias de sus actos. Mientras que, la que vivía en un ambiente autoritario, cada que podía, se escapaba de su casa, mentía a menudo para no ser castigada y se dedicaba a vivir la vida sin control alguno.
Para muchos investigadores, este tipo de conductas suelen ser muy comunes en los hijos, cuyos padres han utilizado un tipo de educación autoritaria o permisiva. Ya que, como lo señalan los autores del libro Relaciones entre padres e hijos adolescentes, "tanto el autoritarismo, como la permisividad pura, producen efectos no deseables en la conducta y salud psicológica de los hijos". (Estévez, Jiménez, Musitu, 2007, p.27)
Y es que, de acuerdo a los autores del mismo libro, los hijos cuya educación se ha basado en el autoritarismo, tienden a respetar menos las normas sociales; contrario a lo que muchos padres esperan logran, mediante las restricciones y los castigos constantes.
Por otra parte, el estilo de educación permisivo tiende a derivar, según los autores, en hijos que no comprenden adecuadamente las normas y reglas sociales y presentan mayores problemas para controlar sus impulsos.
¿Entonces, si ninguno de estos métodos es el adecuado, cuál es la manera correcta de educar a los hijos durante la adolescencia? Es importante mencionar, que no existe un método exacto y preciso, que garantice una conducta equilibrada en los hijos durante esta etapa, ya que recordemos que la adolescencia es un periodo, en el que las hormonas juegan un papel determinante en la conducta y actitud de muchos jóvenes.
No obstante, se puede hacer mucho, si los padres comienzan a involucrarse más con sus hijos, en un proceso de "negociación". De esta manera, las horas de llegada, los permisos para acudir a las fiestas, la cantidad de dinero que reciben, etc., podrán establecerse de una manera más democrática, ya que las decisiones, dejarían de ser unilaterales. Esto, es de gran beneficio para los jóvenes, pues los hace sentir queridos, apoyados, escuchados, pero sobre todo; rodeados de un ambiente en donde la comunicación es equitativa y en donde tienen la oportunidad de expresar su opinión y sus necesidades.
Después de todo, es mejor que los hijos, se sientan aceptados, comprendidos y escuchados, por sus propios padres, antes que por un grupo de jóvenes rebeldes, que podrían inducirlos a conductas negativas ¿No lo creen? (TOMADO DE AOL/LATINO.COM)
Recuerdo muy bien, que cuando estaba en la adolescencia, solía convivir con diversos tipos de jóvenes que estaban siendo educados bajo este tipo de extremos. Por un lado, tenía una compañera de clase a las que sus padres la dejaban hacer todo lo que quería, sin cuestionarla demasiado. Y por la otra, había una chica a la que sus papás no la dejaban hacer nada. ¿El resultado? La chica a la que le permitían hacer de todo, se convirtió en una persona renuente a acatar las normas sociales y a la que no le importaba las consecuencias de sus actos. Mientras que, la que vivía en un ambiente autoritario, cada que podía, se escapaba de su casa, mentía a menudo para no ser castigada y se dedicaba a vivir la vida sin control alguno.
Para muchos investigadores, este tipo de conductas suelen ser muy comunes en los hijos, cuyos padres han utilizado un tipo de educación autoritaria o permisiva. Ya que, como lo señalan los autores del libro Relaciones entre padres e hijos adolescentes, "tanto el autoritarismo, como la permisividad pura, producen efectos no deseables en la conducta y salud psicológica de los hijos". (Estévez, Jiménez, Musitu, 2007, p.27)
Y es que, de acuerdo a los autores del mismo libro, los hijos cuya educación se ha basado en el autoritarismo, tienden a respetar menos las normas sociales; contrario a lo que muchos padres esperan logran, mediante las restricciones y los castigos constantes.
Por otra parte, el estilo de educación permisivo tiende a derivar, según los autores, en hijos que no comprenden adecuadamente las normas y reglas sociales y presentan mayores problemas para controlar sus impulsos.
¿Entonces, si ninguno de estos métodos es el adecuado, cuál es la manera correcta de educar a los hijos durante la adolescencia? Es importante mencionar, que no existe un método exacto y preciso, que garantice una conducta equilibrada en los hijos durante esta etapa, ya que recordemos que la adolescencia es un periodo, en el que las hormonas juegan un papel determinante en la conducta y actitud de muchos jóvenes.
No obstante, se puede hacer mucho, si los padres comienzan a involucrarse más con sus hijos, en un proceso de "negociación". De esta manera, las horas de llegada, los permisos para acudir a las fiestas, la cantidad de dinero que reciben, etc., podrán establecerse de una manera más democrática, ya que las decisiones, dejarían de ser unilaterales. Esto, es de gran beneficio para los jóvenes, pues los hace sentir queridos, apoyados, escuchados, pero sobre todo; rodeados de un ambiente en donde la comunicación es equitativa y en donde tienen la oportunidad de expresar su opinión y sus necesidades.
Después de todo, es mejor que los hijos, se sientan aceptados, comprendidos y escuchados, por sus propios padres, antes que por un grupo de jóvenes rebeldes, que podrían inducirlos a conductas negativas ¿No lo creen? (TOMADO DE AOL/LATINO.COM)
